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Dos faros de fraternidad en el mundo, Asia y América Latina


El Legado Pontificio para el 53° Congreso Eucarístico Internacional, Cardenal Baltazar Porras Cardozo mencionó con gran alegría que, al otro lado del mundo, el Papa Francisco fortalece lazos de fraternidad, a propósito de su visita a Asia, y en Quito-Ecuador, mientras que en Ecuador se profundiza el tema “Fraternidad para sanar el mundo”. Así lo dijo tras recibir la carta de delegación con la que el Papa Francisco le designó como su delegado ante el Congreso Eucarístico Internacional, que se realizará del 8 al 15 de septiembre.

En su corto mensaje, destacó que, con ocasión de la celebración del Congreso Eucarístico y del Simposio que se llevó a cabo en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Quito es también luz para América Latina.

La recepción de la carta del Papa Francisco tuvo lugar la tarde de este sábado 7 de septiembre, en la Catedral Metropolitana de Quito, en el marco de la celebración de Vísperas. La ceremonia litúrgica fue presidida por el Arzobispo Metropolitano de Quito y Primado del Ecuador, Monseñor Alfredo José Espinoza Mateus, sdb, y contó con la participación del Nuncio Apostólico en Ecuador, Monseñor Andrés Carrascosa Coso y varios obispos ecuatorianos y de otros países, así como autoridades de la ciudad de Quito y centenares de fieles que coparon la colonial Catedral quiteña.

Al inicio de la celebración, el Nuncio Apostólico dio lectura a la carta remitida por el Papa Francisco, en la que designa al Cardenal Baltazar Porras, Arzobispo Emérito de Caracas, como Legado Pontificio del IEC 2024.

En la comunicación pontificia, el Papa Francisco señala que es necesario “que construyamos juntos una fraternidad para sanar el mundo, al mismo tiempo que la deseamos “como una única humanidad, como caminantes de la misma carne humana, como hijos de esta misma tierra que nos cobija a todos, cada uno con la riqueza de su fe o de sus convicciones, cada uno con su propia voz, todos hermanos” (Fratelli tutti, 8).

Agrega que, como hermanos, a partir del amor eucarístico, que brota del Corazón de Cristo, “preparemos nuestras almas para el 53º Congreso Eucarístico Internacional, recordando devotamente también el 150 aniversario de la consagración del Ecuador al Sagrado Corazón de Jesús, que se celebrará el próximo mes de septiembre en la ciudad de Quito, donde se llevará a cabo la Statio orbis el domingo 15 del mismo mes”.

En la celebración, la vicealcaldesa de Quito, Ab. Fernanda Racines, le dio la más cordial bienvenida al delegado papal y destacó el compromiso de promover el tema del Congreso “Fraternidad para sanar el mundo” en la ciudad.

Seguidamente, el Legado Pontificio, Cardenal Baltazar Porras agradeció la calidez de la acogida del pueblo ecuatoriano, que le ha hecho sentir como si estuviera en casa. Destacó el proceso de preparación que se ha dedicado al Congreso Eucarístico Internacional y del Simposio Teológico que se cumplió en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador.

En la parte final de la celebración, el Arzobispo de Quito, Monseñor Alfredo José Espinoza Mateus recordó que desde este momento el Legado Pontificio asume la presidencia del Congreso Eucarístico Internacional, por lo que solicitó que sea el señor Cardenal quien imparta la bendición, a nombre del Papa Francisco.

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